Hoy vamos a hablar sobre las gatas y su proceso de reproducción. La pubertad en las gatas generalmente comienza entre los 9 y los 10 meses de edad, pero puede ser un poco más temprano o más tarde. Estas gatitas tienen una temporada reproductiva estacional.
Cuando están en celo, las gatas experimentan un periodo de receptividad sexual, que suele durar alrededor de 7 días, seguido de un descanso de 9 días. A diferencia de las perras, no hay cambios físicos visibles en sus genitales externos durante este periodo. Sin embargo, los cambios en su comportamiento son muy notorios durante el celo.
Es importante saber que las gatas ovulan en respuesta a la monta, lo que significa que si no son cubiertas, entrarán en celo cada 2-3 semanas. La gestación de una gata dura entre 63 y 66 días, y se puede realizar una ecografía abdominal a partir de los 25-30 días después de la monta para evaluar la gestación y la salud fetal.
Si estás pensando en esterilizar a tu gata, debes saber que la cirugía más común es la ovariohisterectomía (OHE), que consiste en extirpar quirúrgicamente los ovarios y el útero. Si no hay problemas en las trompas o en el útero, también se puede realizar una ovariectomía (OVE), que implica extirpar solo los ovarios.
La principal razón para esterilizar a tu gata es limitar su reproducción, pero también puede ayudar a prevenir o tratar problemas de salud graves, como tumores mamarios inducidos por hormonas reproductoras y patologías del sistema reproductor.
Además, la esterilización puede ayudar a prevenir comportamientos no deseados en tu gata, como maullidos constantes, marcaje de territorio con orina y búsqueda de pareja durante los ciclos de celo regulares.
Si estás pensando en esterilizar a tu gata, es recomendable hacerlo antes de que alcance la madurez sexual. La mayoría de los veterinarios sugieren esterilizar a las gatas entre los cuatro y seis meses de edad, ya que el proceso es menos invasivo y tiene una recuperación más rápida.
Recuerda que la esterilización es una decisión importante que debes considerar cuidadosamente, pero también puede ser muy beneficiosa para tu gata y para ti. Si tienes alguna pregunta o inquietud, habla con tu veterinario para obtener más información y asesoramiento personalizado.